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El banquero prófugo de la justicia Nelson Mezerhane no sólo se escapó del país con los ahorros de sus clientes, sino que también permitía la práctica de estafar a su clientela antes de cerrar el banco.
En este caso Mario Silva mostró en La Hojilla una publicación del año 2003 en el diario Últimas Noticias, en la cual una hija esperanzada en la virgen escogida como figura patrona de la entidad bancaria de Mezerhane, le pedía a un poder superior que se le devolviera el dinero a su padre.
“Quiero compartir con ustedes el calvario de mi familia y la más triste e inhumana experiencia que nos ha tocado vivir con el Banco Federal”, afirma la carta, “…lamentablemente en el caso especial de mi padre, inmigrante italiano desde hace 46 años en este hermoso país, tristemente no se ha hecho realidad porque ha pasado más de un año desde que el Banco Federal, a través de uno de sus representantes, lo estafó, quitándole todos sus ahorros, y dejándolo arruinado”.
La carta explica como la directiva del Banco Federal se burló de esta familia, y de su sufrimiento, ocasionando hasta tratamientos médicos para controlar la tensión y la depresión en los afectados, la familia Marzzoli.
Se preguntó Mario Silva “¿De qué nos acusa la oposición, de qué nosotros vamos a expropiar?, ¡no!, acá en este documento está la verdadera expropiación”.