“Unidad, Unidad, Unidad de los
Patriotas”. Este es el camino trazado por nuestro Comandante Chávez, que nos
impulsa a la consolidación de la nueva victoria electoral de las candidatas y
los candidatos del pueblo, el próximo #21Nov”
¡Juntos Es La Cosa! ¡Venceremos!
NICOLÁS MADURO MOROS
Presidente de la República Bolivariana de Venezuela.
Publicación en su cuenta Facebook: @NicolasMaduro
19 de agosto de 2021
UNIR A TODO EL QUE PUEDA SER UNIDO PARA EL OBJETIVO FINAL
“El Partido Socialista Unido de
Venezuela es garantía del futuro, la más grande garantía de la permanencia de
nuestra Revolución, no está, no puede estar en un hombre, una mujer, en uno de
nosotros en lo individual, no, porque sería muy frágil. Una revolución o un proceso
político que dependa de un hombre o una mujer, sería como una gran masa de acero
pendiendo de un cable, de un hilo. No puede depender un proceso, y menos aún si
es un proceso revolucionario de un hombre, de una mujer o de un pequeño grupo
que asuma una posición de vanguardia esclarecida, no. Una Revolución tiene que
asentarse en las profundidades, en las entrañas del pueblo y el pueblo debe
concentrar su fuerza en el Partido Socialista Unido de Venezuela.”
COMANDANTE HUGO CHÁVEZ FRÍAS
Teatro Teresa Carreño
Caracas, Distrito Capital, Venezuela
28/03/2008
Ya conocida la gran mayoría de
los candidatos y candidatas del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) a las
próximas elecciones del 21 de noviembre, donde se elegirán gobernadores,
alcaldes, legisladores regionales y concejales municipales, nos toca a todos y
todas cerrar filas en torno a los candidatos seleccionados para alcanzar la
mayor victoria posible y, con ello, poder mostrarle al mundo entero nuestro
talante democrático y nuestra capacidad política como movimiento
revolucionario. Una victoria contundente el próximo 21 de noviembre, como
seguro estamos que sucederá, permitirá alcanzar mejores condiciones políticas,
económicas, sociales e internacionales. Nuestra victoria tiene repercusiones
históricas e internacionales, se suscribe en el tiempo y repercute en todo el
mundo actual, puesto que de ella se garantizará la posibilidad seguir la ruta revolucionaria
en nuestro país y en la región.
Debemos comprender después de 17
años, que la Revolución Bolivariana volvió a llevar a la oposición extremista y
terrorista a una nueva batalla de Santa Inés, que tiene dos expresiones claras
en este momento: En primer lugar, la mega elección del próximo 21 de noviembre
y, en segundo lugar, el desarrollo de las mesas de diálogo y acuerdos
internacionales que se desarrolla en Méjico.
Es imperativo que todos los y las
militantes de nuestro partido, sumen el mayor grado de esfuerzos para la victoria
en ambos campos (el electoral y el diálogo político); en el caso de los
candidatos seleccionados, es fundamental la humildad y la amplitud para sumar a
todo el que deba ser sumado, con el fin de obtener la más contundente victoria
electoral, el Presidente Nicolás Maduro reflexionaba al respecto en su
encuentro con los candidatos el pasado 14 de agosto:
Y a ustedes les pido máximo
diálogo, método correcto, oír, entender, comprender, sumar, sumar y sumar
voluntades. Tenemos que ir a construir programas actualizados a la realidad, a
los problemas y a las necesidades del pueblo en los 335 Municipios, en los 23
estados, en Caracas. Un programa no es un papel escrito, no, no, un programa es
una guía para saber la acción, es una guía para la acción, para eso es un
programa de gobierno. Nosotros tenemos el Plan Nacional Simón Bolívar, el Plan
de la patria 2025 es la guía central, nacional, estratégica, estructural.
¡Programa, programa, programa!
Equipo, segunda cosa el equipo, no sean sectarios, no sean sectarias, abran las
compuertas y estructuren nuevos equipos, no se conformen con cuatro adulantes que
los rodeen, cero amiguismo. ¡Aquí no puede haber amiguismo! El amiguismo es una
desviación de la amistad, uno debe tener equipos amplios que le den opiniones
diferentes para llegar a una opinión de consenso. Y si usted ve a alguien
adulándolo, así sea su mejor amigo o su mejor amiga, apártelo de inmediato e
ipso facto. ¡Pum! “Fuera de aquí, te vas de aquí, compadre. Eres mi amigo, mañana
te visito pa’ que nos tomemos una guarapita”. Pero una cosa es la amistad y
otra cosa es que tú me vengas a adular, a decir que yo soy lo mejor del mundo,
que soy el más bonito, que soy el mejor gobernante, que todo el mundo me
quiere.
No, no, no, no se dejen adular,
compañero, compañera, por favor, no se dejen adular por nadie.
Los pies en la tierra, los pies,
sobre la tierra. Siempre con el optimismo histórico que tenemos los chavistas,
el optimismo por el futuro, por la patria. Conformen buenos equipos, segundo
consejo, nuevos equipos amplios.
Incorporen a quien fue su
adversario en las primarias, incorpóralo al equipo, compadre, hazlo tu mejor
amigo o tu mejor amiga. ¿Ah? No es una prueba eso del carácter, es un
aprendizaje, porque el que es líder, la que es lideresa debe estar todos los
días preparado para crecer, para cambiar, para mejorar, para sumar. El
liderazgo chavista, el que nos enseñó Hugo Rafael Chávez Frías, es el liderazgo
que suma, el liderazgo que une, el liderazgo que integra voluntades,
conciencias y sentimientos; no el liderazgo que divide, que crea fracciones,
que crea grupos o amiguetes. No, ese no es el liderazgo, el liderazgo
verdaderamente chavista es el liderazgo que une, que suma, que integra y que
permite construir cambios permanentes y permite construir victorias políticas y
electorales en todas las coyunturas.
Quien crea que el objetivo final
es un cargo ignora la importancia estratégica de este momento histórico para la
Revolución y para el destino de la nación, en definitiva, quien asuma posturas
individualistas y sectarias pierde la condición magnánima de pertenecer de
forma orgánica al más grande movimiento Revolucionario del continente y, como
tal, asume posturas que le generan condiciones favorables a nuestro enemigo
real:
El imperialismo norteamericano.
Que no desfallece en su intención de propiciar el mayor daño, división y contradicción
para tomar el poder político y colocar en Miraflores a un títere que cumpla sus
instrucciones.
Cada militante de nuestro partido
debe comprender la dimensión de lo que Fidel le refería al Comandante Chávez en
el año 2009, que era fundamental para la Revolución sumar a todo aquel que deba
ser sumado para alcanzar el objetivo principal: “Chávez, en Venezuela no puede
haber cuatro millones de oligarcas” En efecto, no hay en el país cuatro
millones de oligarcas o mucho más. Todos y todas comprendemos, sin lugar a ninguna
duda, que somos la primera fuerza política y social del país, pero a su vez
debemos reflexionar sobre la necesidad cierta de sumar a un mayor número de
venezolanos y venezolanas a la causa patriótica, a la defensa de la nación, a
la estabilidad política, económica y social; suponer que todo venezolano o
venezolana que nos adversa políticamente o difiere por razones puntales en
algún momento de la Revolución, es un enemigo, es un grave error, que Fidel le
advertía al Comandante Hugo Chávez. Cualquier venezolano o venezolana que asuma
por mínima que sea su razón, la posición del enemigo, es un retroceso en el
objetivo trazado de consolidar mayor fuerza política alrededor del proyecto
revolucionario y la preservación de la República. Cualquier posición adversa a
la nuestra favorecerá los grupos extremos de la derecha nacional y al
imperialismo norteamericano, si estos factores aglutinan algún tipo de
representación significativa de poder, es seguro que propiciarán un mayor daño
al país, como sucedió a partir de la elección parlamentaria del año 2015. Para
el Partido Socialista Unido de Venezuela, para el Gran Polo Patriótico y para
todas las fuerzas revolucionarias, ratificar la condición de mayoría no basta,
estamos obligados a avasallar cualquier vestigio de fascismo, imperialismo,
terrorismo, violencia y de perturbación nacional que pretende el imperio y sus
lacayos, eso lo lograremos con el mayor número de venezolanos y venezolanas
expresando sus votos el próximo 21 de noviembre, a favor del interés nacional,
que en definitiva es la ruta nuestra, la ruta patriótica, la ruta del PSUV y el
Gran Polo Patriótico.
Hay que estudiar la composición
social, política y humana, de la población que nos puede adversar por las razones
que sea; comprendiendo el fenómeno social imperante en ese sector nacional,
debemos buscar fórmulas para sumarlos a la defensa nacional. Existen ejemplos
que pueden guiarnos, el General García Carneiro, como gobernador del estado La
Guaira, llegó a sumar a sectores no afines a la revolución en algunas
coyunturas electorales en el pasado, también lo hizo en muchos momentos el
Comandante Hugo Chávez y ahora lo pide el Presidente Nicolás Maduro: “El mayor
grado de amplitud para sumar en el objetivo de defender la Patria”.
Chávez siempre insistió en la
necesidad de no ser triunfalistas. En efecto, no hay que ser triunfalistas o
solo conformista con la base de apoyo nuestra, que bien está cercana a los 7
millones de electores, debemos y estamos obligados a ir por más. El enemigo
está claro en su propósito de consolidar un mayor número de espacios a los
alcanzados en el año 2017, y así procurar las condiciones necesarias del
posible referéndum revocatorio del próximo año contra el Presidente Nicolás
Maduro.
Es una tarea fundamental de la
Revolución y de todo militante comprender la absoluta necesidad de sumar a todo
el que pueda ser sumado para vencer a quienes nos quieren sumir en la guerra,
el caos y la permanente perturbación de la vida nacional.
¡A SUMAR A TODOS Y
TODAS PARA LA VICTORIA PERFECTA!
Los cambios sociales en el mundo
actual se dan y circulan en el imaginario global de forma acelerada. Esto genera
expectativas y grandes incógnitas en poblaciones que solo esperan saber el
impacto de estos sucesos sobre el futuro inmediato y cómo será la nueva
realidad en los entornos geográficos desde los más cercanos hasta la escala
mundial. Esto es un efecto de la tecnología, que en distintos casos se convierte
en una aliada y en otras, armas de guerra y de desinformación. Esta semana nos
encontramos con que en fracción de segundos la noticia de Afganistán estremeció
al mundo, información que minó los grandes medios tradicionales y distintas redes
sociales. Pero es importante destacar que a pesar de ser una noticia a gran
escala se mantiene en el imaginario sin contenido sustantivo sobre lo que llevó
a la toma del palacio presidencial por parte de los grupos denominados
“talibanes” y las acciones de los Estados Unidos (EEUU) por 20 años en ese
territorio.
Afganistán se encuentra en Asia
Central, es frontera con Irán, Paquistán, Tayikistán, Turkmenistán y China.
Irán comparte más de 900km de frontera con Afganistán. En 1979, cuando la Unión
Soviética se encontraba en el territorio afgano, Estados Unidos financió y
apoyó a los grupos islamistas en la zona, entre ellos a Osama Bin Laden, para
derrocar a los soviéticos, todos eran conocidos como los muyajedines. En 1994
toman el poder y se constituyen como una organización político religiosa, “el
Talibán”.
Las acciones injerencistas del
gobierno de EEUU en territorio de Afganistán solo tenían desde el principio la intención
de invasión y guerra, para lograr la desestabilización de la región y el
dominio del territorio que es el mayor productor de heroína del mundo. Antes de
la intervención, la producción de heroína era mínima y de acuerdo con la
Organización de Naciones Unidas (ONU), a partir de 2002 su producción aumentó
convirtiéndose en la primera nación que más heroína produce. Según la ONU, el
90% de la heroína que se consume en Canadá y el 95% de la heroína que se
consume en Europa provienen de Afganistán (extrañamente, en una Nación que no
tiene salida al mar y tanto los pasos fronterizos como el espacio aéreo eran
controlados por las fuerzas invasoras). En septiembre de 2001, EEUU invade la
Nación centroasiática para deponer al gobierno de los Talibanes y a Osama Bin
Laden, además de supuestamente llevar la democracia dejando con ello al menos 150
mil fallecidos. Ese año, el presidente Hugo Chávez, nuestro Comandante Eterno,
ante la crisis por venir y el incesante bombardeo y ataque a la población civil
afgana indicó que era necesario el “cese de inmediato de los ataques a
Afganistán porque no se puede responder al terror con más terror”. Estados
Unidos alegaba que estos grupos apoyaban a Osama Bin Laden y por ello debía
atacarse y deponerse del poder.
En enero de 2021, uno de los
cofundadores de la organización político militar Talibán, el Mullah Abdul Ghani
Baradar, se reúne con el Canciller de Irán en Afganistán, un pragmático
acercamiento que, ante la evidente estrategia de EEUU, ellos han buscado
caminos de acercamiento y acuerdos con los mismos. No obstante, recientemente
Estados Unidos abandona Afganistán en medio de la desestabilización y profundas
diferencias sociales acentuadas durante la intervención norteamericana. La
intervención en Afganistán es considerada la más larga en la historia de
Estados Unidos y la más costosa, se habla de una inversión de más de mil
millones de dólares. Durante una conferencia de prensa en la Casa Blanca, Jake
Sullivan, consejero de Seguridad Nacional de los EEUU, admitió que una
“cantidad considerable” de las armas estadounidenses acumuladas en Afganistán y
valoradas en miles de millones de dólares, cayeron en manos de los talibanes,
así como municiones, helicópteros y otros pertrechos.
Veinte años de ocupación solo
sembraron caos, tristeza y devastación como legado del imperialismo en esta zona.
Tras el anuncio de la retirada de las tropas norteamericanas y la OTAN, quienes
no lograron por la fuerza y el régimen de terror el objetivo planteado, sino
que dejaron un territorio devastado y con familias en duelo y económicamente
deprimido, no hay cifras que puedan contener el dolor humano generado por la
ocupación del ejército imperial dedicado a realizar acciones militares en
función de los intereses estadounidenses y las transnacionales imperialistas.
Cabe aquí lo que una vez afirmó Eduardo Galeano: “Cada vez que Estados Unidos `salva`
a un pueblo, lo deja convertido en un manicomio o un cementerio”. La pregunta
es qué pasa en estos casos cuando los que se encuentran atrapados son las
poblaciones vulnerables ante las situaciones de crisis, tales como las mujeres
y los niños, quienes además son los más afectados por la guerra y siendo los
únicos afectados directos de la espera en ese futuro incierto de nuevas medidas
sobre las formas de vida sociales y culturales que implican cualquier cambio de
quien ejerce el poder político. De lo que no queda dudas es que los intereses
en EEUU se beneficiaron de la Guerra: la industria de la guerra invirtiéndose
en ella más de un (1) billón de dólares. Además, empresas estadounidenses
participan en la explotación de minerales como litio, hierro, cobre, así como
el petróleo y el gas natural.
Una de las principales amenazas
para la hegemonía militar y económica de EEUU es China. El país asiático ha
dado pasos importantes en materia económica a nivel regional y mundial. Para
ello impulsa dos proyectos claves, por los que EEUU ha prendido sus alarmas: La
alianza político-militar liderada por China, Organización de Cooperación de
Shanghái (Donde Afganistán es Estado Observador) y el mega-proyecto de la
Franja y la Ruta de la Seda. Afganistán representa la ruta de transito más
corta para lograr una conexión que le permita a China llegar al sur de Asia y
África. Incluso desde el país centro-asiático conectar el sur asiático con
Rusia y Europa. De igual modo, proyectos económicos vienen desarrollando China
y Afganistán, entre ellos dos ferroviarios y de desarrollo económico. De allí
que con la retirada de Estados Unidos se aplica la lógica del caos y desestabilización,
una situación de inseguridad y desestabilización detendría el avance del
proyecto económico impulsado por China. Afganistán promete ser una zona en caos
en los próximos tiempos, considerando las contradicciones propias entre los
talibanes y el resto de las fuerzas existentes en ese país.
La situación de Afganistán ha
repercutido en la geopolítica mundial. El Primer Ministro del Reino Unido,
Boris Johnson, anunció la intención de presidir una reunión virtual del G-7
para abordar el tema de Afganistán y asumir una posición frente al
reconocimiento de cualquier futuro gobierno en Kabul. Mientras que Rusia, China
e Irán han entendido la estrategia de EEUU y por ello se han convertido, ya
desde hace tiempo en partes importantes para la concreción de un Acuerdo de Paz
de todos los sectores de ese país.
Todo esto es una evidencia de que
cada día el poder imperial de los Estados Unidos se ve más debilitado y de que
cada país o nación que es intervenido por ellos, es devastado. La paz no es la
política del imperio, si lo es la desestabilización, la guerra, el hambre, la
pobreza y la devastación. Su único interés es el de apropiarse de los recursos
de las naciones aún a costa de la vida de mujeres, ancianos y niños.
La oposición extremista de
nuestro país, pidió en varias oportunidades la intervención de nuestra Patria.
En el supuesto negado de que sus planes se hubieran concretado, tendríamos hoy
la misma suerte del pueblo afgano. Nuestro partido, nuestra militancia y el
chavismo todo, estamos convencidos que la vía para la solución de los
conflictos no es la guerra, sino la paz, el diálogo fraterno entre los
diferentes factores. Pero que, además, debe ser respetada la soberanía y la
autodeterminación de los pueblos.
¡NO HAY DUDA…
LA PAZ ES LA VÍA!
TENEMOS NUEVA SECCIÓN
A partir de esta edición,
incorporamos una nueva sección al Boletín Informativo del PSUV: LECTURA PARA LA BATALLA DE IDEAS, para acompañar
los reiterados esfuerzos del camarada presidente Nicolás Maduro desde sus redes
sociales en la promoción de la lectura entre los venezolanos y las venezolanas.
En sus redes sociales, el
presidente Maduro viene recomendando al menos doce (12) libros en versión
digital en un mes, destacando la importancia del texto en las actuales
circunstancias que vive la Revolución Bolivariana y la necesidad de fortalecer
la esperanza y la fe de nuestro pueblo en la Patria.
Hoy iniciamos la sección con el libro de Augusto Mijares, EL
LIBERTADOR, texto biográfico sobre Simón Bolívar. En nuestras próximas
ediciones seguiremos compartiendo los textos recomendados por el presidente del
PSUV y de Venezuela, para la lectura, el estudio individual y colectivo que nos
conduce a continuar emancipando la mente y elevando la conciencia
revolucionaria, bolivariana y chavista de nuestros y nuestras militantes y de
todo el pueblo.
Secretaría Ejecutiva de la Presidencia del PSUV
El Libertador
Augusto Mijares
Nuestro Presidente Nicolás
Maduro, el 30 de julio de 2021, nos recomienda esta obra titulada El
Libertador, del ensayista, historiador, profesor universitario e Individuo de
Número de la Academia Nacional de la Historia, Augusto Mijares. Con su estilo
que exalta el carácter nacionalista venezolano y con la sutileza de la pluma
que procura rescatar las virtudes de la forja venezolana, Mijares nos deleita
con una biografía de un hombre digno de su admiración, como lo es Simón
Bolívar. Hoy, la Revolución Bolivariana rescata este libro que fue catalogado
por Guillermo Morón, Armando Rojas y Arturo Uslar Pietri como una obra
valiente, excepcional, fecunda, densa, la meta suprema del quehacer del
filósofo, sociólogo, maestro e historiador. Es en esta oportunidad que la Revolución
Bolivariana la publica en el contexto del Bicentenario de nuestra
Independencia, como parte de la Colección Bicentenario Carabobo.
La historia de Bolívar, que
rememora Augusto Mijares en la biografía El Libertador, es una narrativa que pretende
recobrar la vida del ser humano que fue nuestro Libertador Simón Bolívar. Por
ello, narra esta historia desde la perspectiva de una época de la Venezuela
colonial, lo cual coadyuva a comprender a este ser humano con sus virtudes y
sus debilidades humanas. Estas sólo se pueden comprender si comprendemos el
contexto en el que le corresponde vivir a Simón Bolívar.
Mijares nos habla de un Bolívar
humano, lo cual no lo despoja del carácter de hombre extraordinario que se inmortalizó
a través de la historia. En este sentido, nos dice el autor que “En todo caso,
esa humanización del hombre extraordinario no puede consistir en buscarle afanosamente
pequeños defectos, como si con eso quedara reducido al rasero común. Más de
acuerdo con la realidad, por el contrario, insistir en que sus extravíos y
desfallecimientos pueden justificarse por las mismas razones que nos explican
los de los otros hombres, y sin que por ellos el personaje mismo descienda de
su categoría excepcional”
Augusto Mijares se debatió entre
la objetividad y la subjetividad a la hora de la relatar la vida de Bolívar, nos
muestra un trabajo riguroso, lleno de citas de documentos originales para que
el lector pueda tener certeza de las afirmaciones realizadas y para que pueda
consultar las fuentes para obtener mayor información. Pero, también describe la
sociedad colonial de la Provincia de Venezuela, detalla los paisajes de la
Caracas colonial, las bellezas de nuestro Waraira Repano y de cómo la cuna del
Libertador se constituyó a las faldas de la majestad del Ávila.
Mijares saca al Libertador Simón
Bolívar del bronce de las estatuas en las que lo convirtieron las burguesías
nacionales, quienes pretendieron endiosarlo y convertirlo en una imagen ajena
al pueblo. Ciertamente, nos cuenta Augusto Mijares, Bolívar nació de una de las
familias más adineradas de la época. Pero, nos muestra el maestro cómo el
Libertador estuvo obligado muy temprano a reflexionar con el corazón más que
con la mente sobre algunos asuntos humanos que estaban relacionados con la
libertad, las decisiones, los sentimientos, lo cual tuvo una repercusión
conmovedora en su ser.
BOLÍVAR RUMBO AL SUR, RECORRE LA RUTA DE CARABOBO PARA LA UNIÓN DE
AMÉRICA LATINA
Por: ARMANDO GONZÁLEZ SEGOVIA
Doctor en Historia
Profesor Asociado de la UNEARTE
Carabobo un punto en la avanzada revolucionaria de la Independencia en
1821
El Libertador Simón Bolívar,
luego de la Batalla de Carabobo tenía claro lo pertinente de la continuidad de
la lucha por la Independencia. Carabobo es un punto importante en la avanzada
revolucionaria de la Independencia, pero al fin y al cabo un logro al que falta
aún mucho por hacer. Es imprescindible exterminar toda huella del imperialismo
español para poder asegurar la libertad de los pueblos. Los pueblos invadidos
por los imperios europeos no podían mantenerse aislados, sino bajo unos mismos principios
que permitiesen la unión contra cualquiera de las potencias europeas. A
nosotros nos subyugó España, en Brasil Portugal, en las Antillas hubo parte de
Francia, Holanda e Inglaterra. Era necesario entonces unir las banderas para
conjugar una nación.
Una gran nación. Al vencer en
Carabobo, Bolívar está en plena conciencia que le faltaba mucho por hacer. Unas
Repúblicas en ruinas de la guerra, las haciendas en gran parte saqueadas, los
ganados diezmados por las constantes y necesarias búsquedas para mantener los
ejércitos de uno y otro lado de la contienda.
Asimismo, existe una enorme deuda
con los países que apoyaron la lucha, así como a quienes vinieron a prestar sus
servicios a la patria. Nada fácil era el panorama.
Rumbo al sur, solventando las emergencias de las nacientes Repúblicas
Por ello, al llegar triunfante a
Caracas donde según la documentación permanece desde el 29 de junio, con los
asuntos de Estado, recorre Maiquetía, en julio pasa a La Victoria y San Mateo,
llega a Valencia el 10 de ese mismo mes donde permanece hasta el día 23 cuando
viajó a San Joaquín en su retorno a Caracas, ciudad donde permaneció del 31 de
julio al 5 de agosto. El triunfal caraqueño partió de nuevo a Valencia, donde
solamente pasó con otros rumbos.
Llegó a Tinaquillo el 8 de
agosto, a Tinaco el 9, en San Carlos permaneció el 10 y 11; llegó a La Morita,
en las cercanías de Barquisimeto, el 13 y en la mencionada ciudad el 14.
El 7 de agosto de 1821, el
General Pedro Briceño Méndez, por instrucción de Bolívar, informó al Gral.
Páez que estaría al mando en Jefe
del Departamento militar que se ha creado nuevamente, compuesto de las
Provincias de Caracas y Barinas, para facilitar la pacificación del territorio
que comprende este departamento, así como para proporcionar los medios de
subsistencia desde la Comandancia General de Caracas (O’Leary, 1882, t. XVIII,
420).
Las urgencias no se hacían
esperar. Le inquietaban la condición de los enfermos por una parte y las insurrecciones
por otra. Además de las constantes respuestas a los asuntos de Estado. Por
ello, cuando le informaron en Tinaco que los hospitales del Cuartel General
estaban mal asistidos con 200 enfermos y solamente 14 personas que atendían,
ordenó a los Comandantes de los puntos donde haya hospitales del ejército,
desde San Carlos hasta Mérida inclusive, que envíen a todos los convalecientes
que haya en cada hospital a Barquisimeto, a la mayor brevedad.
Allí estarían a disposición del
Coronel Justo Briceño, debiendo hacer remisiones al paso que vayan saliendo de
alta. En cuanto a la insurrección de Coro, organiza tropas que permite
establecer columnas de operaciones sobre Coro, reforzadas con los hombres que
haya a disposición para cubrir el territorio y evitar que se propague la
insurrección (O’Leary, 1882, t. XVIII).
En La Morita, Bolívar ratificó al
Gral. Mariño las instrucciones dadas para la pacificación de Coro, el 13 de
agosto de 1821, para que las tropas, así como Rifles y Tiradores, estén
preparados y prontos de un todo para marchar, sin dilación alguna. De igual
forma, había la orden expresa de cambiar los ganados de los Llanos que llegasen
para librar orden de enviarlos a cubrir la logística de esta contingencia (O’Leary,
1882, t. XVIII, 435).
El martes 14 de agosto en
Barquisimeto, da las Instrucciones para arreglar y organizar las rentas y
haciendas de tabaco en los Departamentos del Occidente de Caracas, y los
distritos de Araure, Ospino, Guanare, Obispos y la ciudad de Barinas.
Para ello deben ser nombrados
personal idóneo y de confianza. También hacer labor contralora sobre el
ejercicio realizado, examinar la exactitud de las cuentas en el Gobierno
español, los registros en los libros, así como dar instrucciones a los
empleados sobre sus deberes. Sobre todo evitar fraudes y malversación de los
fondos. Particular atención tienen la Administración General y factorías de tabaco
de Guanare y Obispos. El Teniente Coronel Juan Pablo Burgos está encargado de
la de Guanare.
Estas rentas se mantienen al
orden y graduación de los empleados sin que exista más Administración General
que la de Guanare y que serán subalternas de ella, todas las
existentes(O’Leary, 1882, t. XVIII, 435-437).
La Ley Fundamental de la Unión de los pueblos de Colombia
Es en Barquisimeto, ese mismo 14
de agosto que recibe el despacho de Ministro de Interior y Justicia con «La Ley
Fundamental de la Unión de los pueblos de Colombia». Esta constituye un paso más
en la construcción de la Patria Grande, había sido sancionada por el Congreso
de Cúcuta el jueves 12 de julio de 1821. En ella las Provincias de Venezuela y
de la Nueva Granada, «quedan reunidos en un solo cuerpo de nación, bajo el
pacto expreso de que su Gobierno será ahora y siempre Popular Representativo»,
la cual será conocida y denominada con el título de República de Colombia.
Para Bolívar esta gran Nación fue
Colombia. Carabobo es un triunfo para formar Colombia, la grande.
Es preciso aclarar que el nombre
de Colombia es antiguo, se encuentra desde el inicio de la invasión expresado
por diversos cronistas. A Miranda se le debe ser el primero que le dio la
connotación en el sentido político como americanismo. Bolívar conforma en las
constituciones desde 1819, cuando se planteó la unión de la Provincia de
Venezuela y los Virreinatos de Nueva Granada y Quito. En 1861, ante una propuesta
de reunificación se presentó el problema cuando al separarse el nombre se aplicó
a una sola de las porciones territoriales de la desaparecida Colombia. “Así
apareció el uso de la expresión Gran Colombia, en el que el epíteto gran no
sola se refiere a una extensión geográfica, sino también connota
nostálgicamente el sentido de grandeza y gloria de la época de Bolívar” (Cock, 1998:
243).
Esta Ley Fundamental expresa que
la «Nación Colombiana es para siempre e irrevocablemente libre e independiente
de la monarquía española, y de cualquiera otra potencia o dominación
extranjera.
Tampoco es, ni será nunca, el
patrimonio de ninguna familia ni persona» (O’Leary, 1882, t. XVIII, 438-441).
Sobre rutas libertarias andamos
Por supuesto, la lucha por la
independencia es un proceso complejo, multifactorial y multicausal. Por ello,
es imprescindible atender todos los requerimientos que posibilitan asumir cada
uno de los frentes de lucha. Si bien es cierto que la confrontación con el
imperio español requirió de apoyo de otros imperios como el inglés, lo cual
trajo a su vez una alta deuda externa. Es imposible pensar que sin el apoyo y
reconocimiento internacional se hubiese logrado la Independencia como Estado,
fue una lucha política con diversas expresiones.
Esta lucha no difiere mucho de
las que hoy día se mantienen con el imperio Norteamericano, donde el Estado
Nacional ha requerido del apoyo de otros Estados que poseen una potencia de
fuerza, tanto económica como de armas, igual a USA, como es el caso de Rusia y
China. ¿Esto indica ceder la soberanía embargada antes a EE.UU a ellas? La respuesta
es que en este momento coyuntural se requiere de estas fuerzas para avanzar,
pero la idea esencial es la permanente soberanía. Al igual que en el siglo XIX
es una lucha política con una expresión económica, en salud, en educación y en
todos los ámbitos de la vida nacional. Entonces, al igual que ahora, la lucha
no puede emprenderse desde las Repúblicas aisladas, porque debemos avanzar en conjunto
hacia las metas comunes que nos unen.
Para ello es preciso consolidar
los aspectos económicos, la producción, así como en el siglo XIX era la
ganadería, el tabaco, entre otros, se requiere ahora de la agricultura
sustentable, de minerales que junto al petróleo abran nuevas alternativas.
Pero al igual que en el tiempo de
Bolívar, es una confrontación de índole política con expresión económica,
sanitaria, educativa, transporte, es decir en todos los ámbitos sociales, y
donde los más afectados somos las mayorías sin bienes de fortuna. De manera que
la idea es llegar a niveles de estabilidad que permitan cubrir los anhelos de las
grandes mayorías de una vida digna y próspera, con salarios justos, con una
solidez que garantice la salud, la educación, la vida misma.
Es decir una revolución donde esté como principio
fundamental la ética para y por la vida de todas y todos sus habitantes.
Referencias:
Cock Hincapié, Olga
(1998), Historia del nombre de Colombia. Bogotá: Instituto Caro y Cuervo.
O’Leary, Simón Bolívar
(1882). Memorias del General O’Leary, Caracas: Imprenta de “El Monitor”; Tomo
XVIII.
Intervención Parcial del Comandante Presidente Hugo Chávez en la
Instalación del Congreso Fundacional del Partido Socialista Unido de Venezuela.
Cuartel San Carlos, Parroquia
Altagracia, Caracas. 12/01/2008.
(…)
Hablaba Fidel hace años atrás
cuando comenzaba la Revolución cubana, sobre las cualidades del militante del
partido, voy a leer esta frase, leo: “Tiene que ser un trabajador ejemplar,
pero además tiene que aceptar la Revolución socialista, tiene que aceptar la ideología
de la Revolución, tiene que desear desde luego pertenecer a este núcleo
revolucionario, aceptar las responsabilidades que impone ser del núcleo
revolucionario, pero es necesario además una vida limpia. Un verdadero
militante revolucionario debe tener una vida limpia...” Y más adelante el Che
Guevara, Ernesto Guevara por aquellos mismos días formando los cuadros de la
Revolución que comenzaba en Cuba, dijo lo siguiente: cito, un cuadro, y todos
ustedes son cuadros y deben serlo cada día más, debemos ser cuadros, ustedes
son delegados, los voceros, como la vanguardia, el frente primero de ataque en
la ofensiva, en el avance, decía el Che Guevara: “Un cuadro es un individuo que
ha alcanzado el suficiente desarrollo político como para poder interpretar las
grandes directivas emanadas del poder central, hacerlas suyas y transmitirlas
como orientación a la masa, percibiendo además las manifestaciones que ésta
haga de sus deseos y sus motivaciones más íntimas...” Quería hacer esas dos
referencias del Che y de Fidel cuando ellos estaban dando esta batalla que
nosotros estamos dando ahora, y de la cual depende el futuro de nuestra
Revolución.
Camaradas, compañeros,
compañeras, una Revolución no puede depender de un hombre, de una mujer, no,
sería muy vulnerable, no puede depender de una cúpula, una élite o una
vanguardia esclarecida. No, una Revolución tiene que asentarse sobre un pueblo,
y ese pueblo, esa masa popular debe generar en su propia dinámica, como decía
Antonio Gramsci, bueno, los cuadros y las estructuras, la maquinaria, la idea,
los motores, los núcleos, los cuerpos revolucionarios, eso tiene que ser la
base fundamental, la fuerza fundamental que nos asegure el impulso permanente
de nuestra Revolución, y, bueno, cuando hemos decidido hacer este esfuerzo es
porque estamos reconociendo que ahí tenemos una debilidad que no hemos podido
solucionar, o reducir en estos años por distintas circunstancias, por las
mismas etapas que hemos venido viviendo.
Debo comentar también, como lo
decíamos aquí nosotros cuando estábamos prisioneros, y seguramente todos
quienes nos antecedieron en la larga historia de este cuartel, bueno, que aquí
al lado está el panteón de los mártires, fijémonos en ellos, y en el primero de
ellos, Bolívar, Simón Bolívar, el Padre Libertador. Lo dijo Bolívar un día,
seguramente cuando se dio cuenta que su proyecto, el proyecto que fue naciendo
no tenía posibilidades de concretarse en aquel entonces, y sin dudas que era un
proyecto pudiéramos llamarlo pre socialista. Quien lea con detalles y en
profundidad el pensamiento verdadero de Bolívar, se podrá dar cuenta que
apuntaba, apuntaba a lo que después fue, o fueron, estaban naciendo las
corrientes como el general Müller lo recordaba hace poco, las corrientes del
socialismo utópico que luego dieron paso al socialismo científico, fue ese
siglo XIX pues donde se fue concretando el proyecto socialista y las bases
científicas del proyecto socialista.
(…)
¡Cuidado en nuestras filas con
una oligarquía bolivariana! Aquí no queremos nuevas oligarquías, nuevas
burguesías.
Porque siempre las oligarquías
son muy hábiles, muy hábiles, muy hábiles. Entonces ese es una de las luchas
que el partido debe dar, fortaleciendo los valores revolucionarios, como aquí
lo decía Fidel Castro, de un militante revolucionario: “debe ser un verdadero
revolucionario”. Un revolucionario que esté pendiente de cuánto hay pa’ eso,
cuánto dinero me va a quedar, ese no es ningún revolucionario, ese es un
contrarrevolucionario.
El corrupto es un
contrarrevolucionario disfrazado a veces de revolucionario. Porque ha pasado
tanto en la historia. A mí, a mí me hicieron una campaña intensa, la
oligarquía, no sólo la oligarquía criolla, sino el imperio, una campaña para
tratar de ganarme, de atraerme. Sólo que no lo lograron pues, y como no lograron
después bueno trataron de matarme, me derrocaron, pero hicieron grandes
esfuerzos, hay que reconocerlo, son muy hábiles los oligarcas de aquí y del
mundo.
(…)
Este año debe ser el año de las
tres R: Revisión, Rectificación y un gran reimpulso revolucionario, y el Partido
Socialista es uno de los actores fundamentales de las 3-Я junto al gobierno, en
todos los niveles, junto al pueblo, como enlace del gobierno y el pueblo, como
impulsor del pueblo, como vanguardia endógena del pueblo, aliado con los demás
partidos.
Los movimientos sociales son muy
importantes, porque más allá de los partidos hay unas muy poderosas corrientes
sociales que no están en ningún partido sino que tienen su propia identidad,
hay que respetarlos, los estudiantes, jóvenes, mujeres que no están en los
partidos, que tienen su propia identidad, sus liderazgos naturales, movimientos
indígenas, movimientos de ecologistas. Más bien hay que ayudar a impulsar esos
movimientos y a enlazarnos con ellos para conformar la gran alianza patriótica.
(…)
Hace 200 años nos tocó ser
vanguardia, 200 años después aquí estamos, somos, yo siempre lo digo, y sintámonos
orgullosos, nosotros somos, y lo decimos con humildad infinita, pero con orgullo
infinito también: aquí estamos los hijos de Bolívar, nosotros somos los hijos
de Simón Bolívar asumiendo de nuevo nuestra responsabilidad histórica, nuestro
papel histórico, y ahora hay que decirle al Padre Bolívar que ahora no araremos
en el mar, que ahora no terminaremos en Santa Marta llorando, fracasados,
expulsados de nuestra propia Patria, no, ni terminaremos en Berruecos como
terminó el Mariscal Sucre: ¡Ay balazos...! Ni terminaremos como Manuela Sáenz
allá en Paita, anciana y solitaria, enferma, soñando con Patria que nunca
llegaron, ni terminaremos como terminó Simón Rodríguez, anciano, enfermo,
muriendo de mengua, que hasta tenían que llevarle: pan, arroz, porque vivía en
la indigencia, era un nómada; Simón Rodríguez terminó siendo un nómada, un
indigente, así murió Simón Rodríguez, el gran Sócrates de Caracas como lo llamó
Simón Bolívar, y diciendo: “¡Ay mi alma!”
No, nosotros no terminaremos así,
ellos viven con nosotros, y viven en nosotros, su martirio será la victoria
nuestra, fuerza para nuestra victoria y la de nuestros hijos, nosotros no les
dejaremos a nuestros hijos la perdición de la Patria. Nosotros le dejaremos a
nuestros hijos una Patria grande y libre, lo haremos cuéstenos lo que nos
cueste, lo haremos. Y el partido tiene que asumir esto con la dureza de una
espada, del acero.
(…)
He aquí parte de las reflexiones
para apuntar la necesidad del Partido Socialista Unido de Venezuela y la
importancia de este evento de hoy. “Todo ello — sigue diciendo Müller y Alí—
demanda de un partido político que posibilite la ejecución del proyecto socialista”.
Y aquí entonces avanzamos a un estado superior, no se trata de cualquier
revolución, porque las ha habido democrático-burguesas, ya lo dijimos hace un
rato, y ellos aquí lo señalan; no se trata de una Revolución solamente
nacionalista, no se trata de una revolución pasajera, no se trata de una
revolución de mentira, se trata de una Revolución socialista, y de allí que el
partido lleve la bandera principal del socialismo revolucionario, del socialismo
bolivariano, indoamericano, nuestro socialismo. ¿Ven? El proyecto socialista. Y
que además el partido, el partido, el gran partido defienda, defienda el
control del poder nacional por parte del pueblo organizado. El partido y el
socialismo, ya que toqué el tema del socialismo, para ir concluyendo.
El socialismo, bien lo dice
Müller, y lo hemos venido desarrollando como tesis, nosotros creemos que la tesis
que coloca al socialismo como algo inevitable pues, como un camino que algún
día llegaremos inevitablemente a él, como algo biológico, como un cuerpo humano
que bueno, algún día me pongo viejo o una planta que nació bueno, algún día
echará frutos.
No, eso no es el socialismo, no
es algo biológico o determinista, algún día bueno, no, saldrá el sol, es inevitable
que salga el sol o inevitable que llegue el invierno y comience a llover, no;
el socialismo es sólo una posibilidad, porque hay quienes todavía defienden la
tesis dogmática de que el desarrollo del capitalismo inevitablemente llevará al
socialismo, y este, inevitablemente algún día cuando haya condiciones objetivas
y subjetivas y tal y cual irá a la sociedad perfecta, el comunismo.
(…)
Nuestro partido debe ser una
escuela forjadora de voluntad, nosotros, en el partido socialista, cada uno de
nosotros, cada una de ustedes compañeras debe ser una sólida columna de
voluntad, férrea voluntad de construir el socialismo bolivariano y es que lo
vamos a construir, tenemos que construirlo, no podemos fallar, una escuela de
voluntades. Ahora ¿saben ustedes una cosa, lo sabemos, pero para que haya
voluntad, la voluntad es también una posibilidad, para que haya voluntad es
imprescindible que haya conciencia, y la conciencia, voy a repetirlo, con Víctor
Hugo, el de Los Miserables, no es sino la suma de las ciencias y del conocimiento,
el que no sabe es como el que no ve, dice el pueblo en las calles, de ahí la
importancia del estudio, en lo individual y en lo colectivo, de ahí la importancia
vital del conocimiento, la educación, la cultura, la conciencia de lo que
somos.
Yo nunca dejaré de insistir en
esto, y una de las grandes tareas del partido es convertirse en una escuela
forjadora de conciencia y por tanto forjadora de voluntad, la conciencia es el
único motor que puede mover la voluntad más férrea, la conciencia es capaz de
llevarlo a uno a la cruz: me van a colgar, a crucificar, no importa ¿qué
importa? O como dice aquel buen libro, en mi criterio, que yo cuando andaba persiguiendo
a Alí Rodríguez, ya yo andaba leyendo libros subversivos, porque yo soy un
subversivo, me fui haciendo subversivo, y este tiene que ser un partido subversivo,
nosotros tenemos que seguir subvirtiendo el modelo histórico capitalista del
estado burgués, cada gobernador tiene que ser un subversivo; cada gobernador
bolivariano, cada alcalde, cada diputado, cada presidente, cada ministro, cada
hombre, cada mujer, un subversivo.
(…)
Entonces fíjense, el socialismo,
crear, poder, es una cuestión de poder también, el partido tiene que ser un
espacio de poder, poder moral, autoridad moral, poder político, el partido y su
poder político, la eficacia política, nosotros por ejemplo miren, debemos
fijarnos una meta, que yo sé no es fácil, pero ¿quién dijo que a nosotros nos
gustan las metas fáciles? Nosotros en primer lugar, y así quiero que nos fijemos
esa meta, debemos conservar el poder en todas las gobernaciones y alcaldías que
hoy tenemos, en primer lugar, en primer lugar ¡Cuidado pues! Y alcaldías
mayores, pero además ir a la conquista del poder en aquellas gobernaciones y
alcaldías donde todavía no hemos podido, para allá es que vamos con fuerza,
unidad, cohesión, mística revolucionaria, resolución a la victoria
incuestionable.
(…)
Instituto de Altos Estudios “Hugo Chávez”
Fuente: www.todochavezenlaweb.gob.ve