Es imposible que el sistema de monitoreo de la refinería de Amuay, en el estado Falcón, donde se produjo un incendio el sábado pasado, no haya registrado una fuga de gas, afirmó Rubén Figuera, gerente de Nuevos Desarrollos de la Faja Petrolífera del Orinoco (FPO).
Durante su participación en el programa Contragolpe, que transmite Venezolana de Televisión, Figuera señaló que  la misma naturaleza de las operaciones impide que este tipo de situaciones pasen desapercibidas.

Aseguró que el equipo que labora en el complejo de refinación está conformado por individuos con alto sentido de responasbilidad, que hacen un monitoroereo de forma constante, pues en un mismo punto durante en un día se puede hacer la revisión hasta 12 veces.
“La refinería hoy está en manos de la gente más capaz que puede haber, incluso en el mundo, recordemos que este es el centro refinador más grande del mundo”, acotó.
Figuera dijo que “el complejo en su totalidad es un ambiente de atención le dedicamos desde nuestros sistemas preventivos, hay mecanismos de identificación, control, mitigación y recuperación de cualquier evento que se pueda producir”.

El representante de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) explicó que previo a que se presentara el siniestro, cercano a la media noche, el gerente de proceso de guardia percibió la presencia de una acumulación de vapores y en el en el transcurso del momento en que trata de ubicar la fuente y controlar la misma, ocurre la explosión.

Ratificó que se cumplieron los procedimientos ante la emergencia e indicó “uno de nuestros bomberos estaba interviniendo en esa operación para identificar la situación y controlarla, cuando hacen frente a esta explosión y en ese intento muere el operador”.

De igual forma, refirió que “en la refinería, como en todas las áreas industriales de esta naturaleza, los equipos eléctricos son intrínsecamente seguros, es decir,  ellos por si mismos no son capaces de generar una fuente de inmisión. Todos los factores asociados a equipos eléctricos, motores, de nuestra instrumentación se encuentran descartados”.

Dio a conocer que “nosotros tenemos diversos mecanismos de inspección y mantenimiento, no desvinculemos esas dos rutinas, porque es importante mantenerlas integradas, tenemos mantenimiento ordinario y mantenimiento extraordinario”, éstos últimos son las llamadas de planta cada tres o cuatro años por completo y se desalojan sus fluidos y este proceso no se ha dejado de cumplir y cuenta con el aval internacional.

El funcionario agregó que lo que ocurrió fue una fuga de oleofina y una mezcla de gases que se utilizan en el proceso de refinación, y que se está investigando el foco que activó esta situación, por medio de un comité trabaja para dar con las causas.

Negó que exista algún tipo de riesgos, por lo que exhortó a las personas que viven cerca de la planta a mantener la tranquilidad. Apuntó que “en estos momentos hay tres tanques en incendio (200, 203 y 204), pero existe un control en marcha de la combustión del hidrocarburo” y no hay posibilidad de propagación.