Achatina fulica es el nombre científico del
llamado caracol africano, que ha estado expandiéndose paulatinamente por el
territorio nacional y que ha alertado a la población por sus posibles agentes
contaminantes, sin embargo esta especie no debe ser considerada un ente epidémico,
porque el contagio con los distintos parásitos depende del entorno en el que se
desarrollen, afirmó Jorge Javier Calderón representante de Epidemiología del
estado Mérida.
Calderón indicó que los distintos agentes
biológicos que conviven en esta especie se reproducen de acuerdo al contacto
del caracol con otra variedad de animales del ecosistema. Ejemplo de esto es la
transmisión del Angiostrongylus cantonensis, parásito causante de la
meningoencefalitis eosinofílica, una enfermedad que combina dos tipos de
meningitis, la inflamación de las meninges y la encefalitis, que es la
inflamación del cerebro.
Por su parte Rosalba Rodríguez coordinadora
de salud de la localidad capareña señaló que gracias a la inmediata visita de
epidemiologia podemos contar con la orientación necesaria para combatir esta
especie. Dentro de las indicaciones y procedimientos a realizar si nos
encontramos este caracol podemos resaltar que se debe manipular con guantes y
no exponerse al contacto directo.
Una vez detectado se toma el molusco y se
introduce en un recipiente que contenga tres porciones de agua y una de sal o
en su defecto tres porciones de agua y una de cloro, pero no se debe mezclar el
cloro con la sal, después de realizado este procedimiento y muerto el caracol
se debe hacer una fosa de 50 cm cúbicos e introducir el molusco en esta fosa y
cubrirla bien, ya que es la única manera de erradicar con la plaga.
Para finalizar Omar Contreras alcalde del
Municipio Padre Noguera conjuntamente con las autoridades sanitarias se
dirigieron a toda la población por medio de las emisoras radiales comunitarias
para hacer nuevamente el llamado de atención e indicar toda la información
acerca de esta especie.